Publicado: 28/08/2012 - Actualizado: 11/11/2020
Autor: Mire Reyes
El consumo de alcohol es algo que se ha vuelto casi tan aceptable como comer y respirar. Sin embargo, los efectos nocivos del alcohol, han sido bien documentados.
El alcohol, en exceso puede contribuir a la disminución del rendimiento, al deterioro mental, la adicción es posible, la diabetes y enfermedades del hígado en diversos grados en algunas personas, de tal forma que existen varios motivos para mantenerse alejado de él.
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¿El alcohol engorda?
En su forma más pura, el alcohol etílico, abastece siete calorías por gramo, el alcohol proporciona energía, y por lo tanto debe contabilizarme como aporte de calorías en la dieta.
A diferencia de los macronutrientes como hidratos de carbono, proteínas y grasas, el alcohol proporciona lo que los nutricionistas se refieren a menudo como calorías vacías, es decir, calorías sin nutrición. Para empeorar las cosas, es el primer combustible que se utilizará cuando se combina con hidratos de carbono, grasas y proteínas, posponiendo el proceso de quema de grasa y contribuir a un mayor almacenamiento de grasa.
Si aún a pesar de ello, deseas beber alcohol, el vino es una opción aceptable e incluso saludable. Si el vino no se adapta a tu gusto, entonces podemos recurrir a puro licor como whisky, el vodka y la ginebra, siempre que al mezclarlos, no le añadamos calorías, es decir, que evitemos los zumos, en su lugar, agua gasificada o un refresco dietético.
No obstante, debemos saber que, el consumo de alcohol, no se recomienda para nadie que desea perder peso, ya que puede ser un problema para quemar la grasa del cuerpo.
El alcohol proporciona casi el doble de calorías de nutrientes como proteínas y carbohidratos. De hecho, el alcohol tiene sólo dos menos calorías que la grasa, esta última tiene nueve por gramo. Otro problema es que el alcohol es muy engañoso, pasa a través del sistema rápidamente, a menudo, antes de que el bebedor sea consciente del número de bebidas que ha consumido.
Las bebidas alcohólicas también contienen calorías de otras fuentes, que se suman a la ingesta calórica total. Ciertos cócteles, por ejemplo, contienen grasas o azúcar en su preparación.
¿El alcohol es nocivo para la salud?
El Alcohol, cuando se consume en exceso, puede dañar el estómago, los riñones y el hígado.
Dado que el alcohol es un subproducto de la fermentación de levadura, puede tener un efecto irritante sobre la mucosa del estómago y tras su consumo continuo, se debilitan gradualmente los riñones y el hígado, dando lugar a graves problemas de salud, incluso la muerte en algunos casos.
Cualquier debilitamiento del estómago disminuirá la velocidad y eficiencia con la que se digiere el alimento, lo cual finalmente interfiere con un metabolismo saludable y el proceso de pérdida de peso.
El hígado, es un órgano que procesa las toxinas y descompone las grasas para combustible, esta función es crucial, cuando se trata de cuidar tu peso. Por lo que el consumo de alcohol habitualmente en tu dieta, puede traer problemas a tu hígado.
El alcohol aumenta el apetito
El alcohol puede aumentar el apetito, por lo que la combinación de alcohol y una comida rica en calorías, es aún peor. Aunque al vino tinto se le han atribuido grandes beneficios, esto no significa que debemos exceder su consumo. Una copa antes de comer, puede funcionar como digestivo, y disfrutar de sus beneficios para la salud, más no es el común denominador, de el alcohol en general, por lo tanto debemos evitar su consumo.
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Referencias
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Revisado por: Dra. Loredana Lunadei el 11/11/2020
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